REM dice adiós. Una de esas noticias que te dejan con cara de sorpresa y un poso de tristeza. Y es que REM es una de esas bandas que uno cree eternas, como U2 o Rolling Stones. Ni siquiera te habías planteado nunca que los Stipe y compañía pudieran cansarse de hacer música juntos. ¿Que llevaban tiempo ofreciendo lo mismo? Sí y, ¿qué? Cada nuevo disco de REM siempre era bienvenido, solo la espera y la curiosidad por sus nuevas canciones ya merecían la pena. Aunque luego ofrecieran un decepcionante Accelerate o el aceptable Collapse into Now. Pero eso se acabó ayer, dejándonos a muchos huérfanos de uno de los mejores grupos de la historia.
A lo largo del día uno ve con estupor como la separación de este mítico grupo, 31 años después de su formación, no tiene casi espacio en los informativos de televisión. “¡Joder, que es REM!”, piensa uno. Poco importa lo que a uno le pase por la cabeza, en la época de la Danza Kuduro, Lady Gaga o los 'productos' de la factoría Disney, la noticia de la separación de REM pasa prácticamente desapercibida. Es lo que hay.
Imitation of Life es la canción que me hace descubrir a REM allá por el 2001. Era el primer single de su disco Reveal. Con 13 años, uno todavía está educándose musicalmente, pero REM se convertía en toda una revelación y nunca mejor dicho. Dos años después sacaban su recopilatorio In Time: The Best of R.E.M. 1988-2003, que tardó poco en llegar a mis manos. Losing my Religion, Man on the Moon, The Great Beyond, All the Way to Reno , Everybody Hurts, All the Right Friends,… Brutal. Con el tiempo uno descubre que faltan canciones imprescindibles como Shiny Happy People o The One I Love, pero en ese momento las 18 canciones de ese disco eran suficientes para pasar meses y meses escuchándolo.
REM se separa, pero sus canciones siempre estarán ahí y para muestra este Top 5:
1. Losing my Religion.
2. Shiny Happy People.
3. Imitation Of Life.
4. The One I Love.
5. Everybody Hearts.
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