Ir al contenido principal

FRASES (VIII): Un mundo feliz


"Prefiero ser yo mismo. Yo y desdichado, antes que cualquier otro y jocundo".

"No se pueden fabricar coches sin acero; y no se pueden crear tragedias sin inestabilidad social. Actualmente el mundo es estable. La gente es feliz; tiene lo que desea, y nunca desea lo que no puede obtener. Está a gusto; está a salvo; nunca está enferma; no teme la muerte; ignora la pasión y la vejez;  no hay padres ni madres que estorben; no hay esposas, ni hijos, ni amores excesivamente fuertes. Nuestros hombres están condicionados de modo que apenas pueden obrar de otro modo que como deben obrar. Y si algo marcha mal, siempre queda el soma".

"La felicidad real siempre aparece escuálida por comparación con las compensaciones que ofrece la desdicha. Y, naturalmente, la estabilidad no es, ni con mucho, tan espectacular como la inestabilidad. Y estar satisfecho de todo no posee el hechizo de una buena lucha contra la desventura, ni el pintoresquismo del combate contra la tentación o contra una pasión fatal o una duda. La felicidad nunca tiene grandeza".

"Donde hay guerras, donde hay una dualidad de lealtades, donde hay tentaciones que resistir, objetos de amor por los cuales luchar o que defender, es evidente que la nobleza y el heroísmo tienen algún sentido. Pero actualmente no hay guerras. Se toman todas las precauciones posibles para evitar que cualquiera pueda amar demasiado a otra persona".

-"Me gustan los inconvenientes. Yo no quiero comodidad. Yo quiero a Dios, quiero poesía, quiero peligro real, quiero libertad, quiero bondad, quiero pecado".
- "En suma, usted reclama el derecho a ser desgraciado. Sin hablar del derecho a envejecer, a volverse feo e impotente, el derecho a tener sífilis y cáncer, el derecho a pasar hambre, el derecho a ser piojoso, el derecho a vivir en el temor constante de lo que pueda ocurrir mañana; el derecho, en fin, a ser un hombre atormentado".
- "Reclamo todos estos derechos".

Aldous Huxley, Un mundo feliz.

Comentarios

Entradas populares de este blog

CINE: '¿Plagio u homenaje?'

Hace unos días visioné Malas tierras (1973), la primera película de Terrence Malick, ese poeta metido a cineasta, que solo ha firmado cuatro películas en 38 años. Días del cielo (1978), La delgada línea roja (1999) y El nuevo mundo (2005) son los regalos que este director estadounidense le ha hecho al séptimo arte, aunque no habrá que esperar mucho más para ver su nueva obra. The tree of life será estrenada en el próximo Festival de Cannes con Brad Pitt y Sean Penn como protagonistas. ‘Malas tierras’ es una estimable película sobre una pareja de jóvenes que al más puro estilo Bonnie and Clyde recorren la América profunda dejando a su paso un reguero de muertes. Martin Sheen y Sissy Spacek bordan a ese par de enamorados, absolutamente insensibles ante las atrocidades que cometen. Pero el objetivo de este ‘post’ no era hablar de la película, sino llamar la atención sobre un detalle curioso de su banda sonora.

FRASES (X): El fin de la infancia

"Todas las religiones del mundo no pueden ser verdaderas, tarde o temprano el hombre tendrá que admitir la verdad". "Palabras vacías, palabras por las que los hombres habían luchado y habían muerto, y por las que nunca volverían a luchar y a morir otra vez. Y el mundo sería mejor así". "Los crímenes habían desaparecido. Se habían hecho tan innecesarios como imposibles. Cuando a nadie le falta nada, no hay motivo para robar". "Los credos basados en milagros y revelaciones habían desaparecido totalmente, desvaneciéndose poco a poco a medida que crecía el nivel de educación". "Bajo la intensa y desapasionada luz de la verdad las creencias que habían alimentado a millones de hombres durante dos mil años, se desvanecieron como el rocío de la mañana". "Mientras no estuviera seguro, podía soñar al menos". "La raza humana ha demostrado no poder resolver los problemas de este planeta minúsculo".

LITERATURA: Frases (IV). Meridiano de sangre

"Los dones del Todopoderoso son repartidos en una balanza que le es peculiar. Sus cálculos no son equitativos y estoy seguro de que él seria el primero en reconocerlo si uno se atreviera a plantearle la cuestión." "El fuego contiene en si mismo algo de los propios hombres en la medida en que el hombre es menos sin el y se aparta de sus orígenes y está como exiliado, pues cada fuego es todos los fuegos, el primer fuego y el último que habrá nunca." "Da igual lo que los hombres opinen de la guerra, la guerra sigue. La guerra siempre ha estado ahí, antes de que el hombre existiera, la guerra ya le esperaba." "Cada hombre busca su propio destino y el de nadie más. Lo quiera o no. Aunque uno pudiera descubrir su destino y elegir en consecuencia un rumbo opuesto solo llegaría fatalmente al mismo resultado y en el momento previsto, pues el destino de cada uno de nosotros es tan grande como el mundo en que habita y contiene en si mismo todos